Educación financiera a través de la experiencia
Diego García, José Rafael Rijo, Bryan Abreu y Apolinar Estévez, jóvenes de la Fundación Manos Unidas por el Autismo, abrieron su primera cuenta de ahorros. Visitaron la sucursal de San Gerónimo junto a siete compañeros de la fundación para explorar los primeros pasos hacia una autonomía económica.
La experiencia complementa los talleres de educación financiera que voluntarios de la Asociación Popular de Ahorros y Préstamos (APAP) imparten a los participantes del programa Preparación para la Vida Adulta de la fundación.
La entidad financiera impulsa la bancarización de personas con discapacidad fisicomotora, cognitiva o sensorial a través del programa APAP TODOS, de cultura y servicios financieros inclusivos.
Más de 500 personas con discapacidad recibieron charlas de educación financiera en 2016, la mayoría de ellos en lengua de señas, como parte del programa.
Las visitas a sucursales, en el marco de abril como mes de concienciación sobre el autismo, utilizan el aprendizaje vivencial para que los jóvenes y adultos fortalezcan las capacidades de relaciones interpersonales y comprendan el manejo del dinero.
Al mismo tiempo sensibilizan a los colaboradores sobre la importancia de minimizar las barreras en el acceso a servicios para personas con discapacidad.
El primer grupo que participó en esta experiencia fue recibido por el equipo de la sucursal de APAP en San Gerónimo y su gerente, Auhilda Ramírez, junto a Aida Alcántara, gerente de Control Regulatorio y voluntaria de Talento Solidario. También le acompañaron Odile Villavizar, directora de la Fundación Manos Unidas por el Autismo, Ingrid Ramírez, terapeuta, Rafael Pérez y parte del equipo que trabaja con jóvenes y adultos.